Nuestras soluciones están diseñadas para prevenir el desprendimiento de partículas del suelo, permitiendo el restablecimiento de la vegetación. Desarrollamos mantos no tejidos fabricados en fibras sintéticas y fibras naturales (fique y coco).
¿Cómo elegir el manto adecuado para control de erosión?
Durabilidad
Geometría e inclinación del talud.
Intensidad y frecuencia de lluvias y vientos.
Tipo de suelo.
Tipo de vegetación.
Ventajas de los mantos de control de erosión temporales
Especiales para aplicaciones con duración inferior a 36 meses.
Minimizan la energía de la gota lluvia y la incidencia de la radiación.
Aportan a la rápida revegetalización.
Reducen la velocidad del agua, evitando el arrastre de sedimentos.
Neutralizan la acción del viento.
Protege las semillas facilitando su crecimiento.
Contrarrestan el resecamiento del suelo porque retienen humedad del rocío, de riego y de lluvia.
Al biodegradarse mejoran la textura y aportan nutrientes a la tierra.
Ventajas de los mantos de control de erosión permanentes
Recomendados para aplicaciones donde el producto debe durar más de 36 meses.
Alta resistencia a la tensión lo cual asegura la integridad física para aplicaciones en pendientes pronunciadas.
Resistentes a la radiación solar lo cual mejora su durabilidad.